Después de las vacaciones y con la vuelta a la rutina debemos volver a organizarnos nuestro día a día. Con el break de verano, quizás estás un poco desentrenado. Por eso, Sophie te trae las 7 claves para tener éxito con una dieta saludable y una buena organización. ¡Empecemos!
Volvemos a la rutina y, si queremos llevar una vida saludable, comiendo sano y practicando deporte, debemos ser muy organizados. Después de leer las claves que te propongo en este post, no servirá la excusa de “no tengo tiempo para hacer dieta o ir al gym” 😉
A nivel personal, cuando empecé a comer sano también tuve que cambiar mis hábitos y empezar a organizarme mejor para poder compaginar el fitness con mis estudios. Por eso hablaré desde mi propia experiencia para intentar ayudarte si te encuentras en una situación similar, ya sea por compaginar tu vida fit con trabajo, estudios o lo que sea. Las claves que comentaré a continuación son aplicables a todos los casos: si quieres adelgazar, mantenete o ganar masa muscular. Una vez te acostumbres a tener una rutina con las comidas y los entrenos, tu cuerpo te lo agradecerá y será mucho más fácil poder compaginarlo todo.
Empecemos por dejar claro que hacer tus comidas fuera de casa no tiene porqué ser un problema si llevas una planificación adecuada. Muchos creen que por depender de tuppers no se puede llevar una buena alimentación. Eso no es cierto. Vamos a ver cómo hacerlo.
1. Planificar la semana: Lo primero y más importante es pensar en cuántas horas vamos a pasar sin pisar nuestro hogar, qué cosas tenemos que hacer, a qué sitios tendremos que ir, cuándo podemos comer y cuándo vamos a entrenar. Un error que comete mucha gente es salir de casa sin nada, pasar hambre y encima estar largas horas sin comer. No sabéis lo perjudicial que puede llegar a ser. Esto nos puede llevar a devorarlo todo cuando lleguemos a casa, a encontrarnos de mal humor o sentirnos cansados.
2. Hacer unas 5 o 6 comidas diarias: Si llevamos un horario muy extenso (levantarnos muy temprano y acostaros muy tarde) podríamos hacer hasta 7. Lo ideal sería no dejar pasar más de 3 o 4 horas entre comida y comida, para evitar que el metabolismo se ralentice. Es mejor comer poco constantemente que comer mucho de vez en cuando.
3. Incluir distintos tipos de alimentos e intentar variar la dieta al máximo a lo largo del día: De esta manera conseguiremos no aborrecer la dieta y no sentiremos tanto la necesidad de saltárnosla.
4. Designar un día para planificar las comidas de la semana (o al menos, los desayunos y snacks) y hacer una lista de la compra semanal: También sería buen momento para dejar pre-cocinados algunos alimentos para que nos sea más fácil cocinar el resto de la semana (el conocido Meal Prep). Ayudaros de planificadores es muy útil.
5. Llevar siempre una botella de agua encima: Una buena hidratación es muy importante y hay que acostumbrarse a beber mucha agua (por ejemplo, yo intento siempre beberme dos vasos de agua en cuanto me despierto). También es recomendable llevar algún tipo de snack de emergencia en el bolso o mochila, por si surge algún imprevisto y nos retrasamos en nuestros horarios.
6. Darse una o dos comidas libres semanales (sobre todo en dietas para bajar de peso): Nos puede ayudar a continuar nuestra dieta con más fuerza sin repercutir en los progresos.
7. No ser restrictivo y aprender a ser flexible: Al final el cuerpo reacciona contra ti si dejas de escucharlo, así que es mejor pecar un poco cada día que meterse un atracón. Hay que vivir la vida por encima de los planes, éstos solo son orientativos. No debemos sentirnos frustrados si un día algo no sale como pretendíamos. Cada día es uno nuevo para empezar de 0.
¡A por todas, babies! 😊
*Añade a tu playlist de entrenamiento:
Un comentario Añadir valoración